GUERRA SUCIA*

Por Héctor José Corredor Cuervo

Nada más conveniente en los actuales momentos, cuando los diques de contención de la moral y el orden parecen reventarse por la acción de muchos compatriotas que han venido consintiendo la anarquía, mediante el debilitamiento de los poderes del Estado y específicamente de las Fuerzas Militares en una GUERRA SUCIA que apareció con fuerza desde principios de 1980, cuando se mezcló la política, el narcotráfico, la subversión, el paramilitarismo, para impedir el ímpetu de la acción del Estado y minar la voluntad de lucha de los hombres en armas. Las guerras internas desarrolladas hasta entonces por el sectarismo político y la confrontación ideológica dejaron de tener vigencia cuando se consolidó el narcotráfico como un super poder económico con grandes conexiones internacionales, con capacidad de comprar conciencias y comprometer voluntades; con ambiciones de poder político y social; cuando el derecho a la vida, a la democracia, a la libertad de prensa y expresión se transformaron en mercancías susceptibles del alquiler o de la compra.

Debido a las inversiones económicas tan altas requeridas para adelantar las campañas políticas y en razón a que éstas sólo las podía hacer la elite tradicional por ser la única que tenía la capacidad de pagar los altos costos de los votos, de la radio, de la televisión, de la prensa, de los demás medios publicitarios y del transporte, muchos de los aspirantes a cargos representativos buscaron apoyo en los narcotraficantes, esmeralderos y contrabandistas para asegurar la elección con el compromiso de ser protegidos y con la aspiración de lograr ubicar sus recomendados en altos cargos para impedir la actuación en contra de sus propósitos. Algunos políticos por temor a la amenaza de la delación, aunque aparentemente negaban su relación con narcotraficantes, los apoyaron soterradamente. Es aquí cuando se da comienzo a la "GUERRA SUCIA" que no es otra cosa que la continuación de la política por otros medios como son: la infiltración y penetración en los distintos organismos del Estado y específicamente en las Fuerzas Armadas para conquistar su voluntad y dividirlas; el asesinato selectivo de civiles y militares que no se dejaron comprar o se opusieron a sus propósitos; la compra de información para conocer con tiempo las actuaciones de las autoridades y de las Fuerzas del Orden; las campañas de difamación por actos violentos que ellos mismos planearon y ejecutaron con la anuencia de algunos elementos que olvidaron el juramento a Dios y la promesa a la Patria; el desprestigio del servicio militar obligatorio y el impedimento de utilizar los bachilleres para dejarle la responsabilidad de la defensa nacional únicamente a los de ruana; el terrorismo simultáneo para demostrar su poderío militar y la incapacidad de la Fuerza Pública para controlarlo; el asalto a pueblos y caseríos indefensos para hacer demostraciones de fuerza y presencia en todo el territorio nacional; la masacre de campesinos indefensos con la disculpa de considerarlos auxiliadores de la izquierda o de la derecha cuando en la realidad lo que buscan es apropiarse de las tierras o cultivos.

Esta GUERRA SUCIA contra las Fuerzas del Orden y específicamente contra las Fuerzas Militares, encontró eco en el contexto internacional llegando a ser consideradas como incapaces e ineficientes; el Fondo Monetario Internacional recomendó a la Comisión del gasto público congelar los salarios, detener el crecimiento de las Fuerzas Armadas para disminuir el déficit fiscal; algunas organizaciones no gubernamentales (ONG) las sindican sin presentar pruebas de ser los violadores de los Derechos Humanos. ¿Hasta cuando resistirá la GUERRA SUCIA las Fuerzas Armadas ante la mirada complaciente de algunas instituciones del Estado, y de políticos a quienes les han garantizado el libre ejercicio de la democracia? ¿Si hay violación de los Derechos Humanos por algunos de sus integrantes por que no se presenta pruebas que permitan juzgarlos? ¿ Porqué no se da la misma publicidad cuando los derechos humanos son violados por los autores reales de la violencia?.

* La República Junio 27 de 199* Periódico Acore., 1998

* El Diario De Tunja., noviembre 20 de 1998

* El Diario De Tunja., noviembre 27 de 1998

* El Diario De Tunja., diciembre 04 de 1998